Lo primero que debemos decidir es si los peces van a ser de agua fría o agua caliente, para ello es importante aclarar las diferencias entre ambos:

• Los peces de agua fría son pacíficos y de movimientos lentos, son muy resistentes y es muy fácil la convivencia entre variedades.
• En los peces de agua caliente hay mucha variedad de formas y cuentan con mucho colorido. Necesitan una temperatura constante entre 23 y 25 ºC. Es fundamental escoger qué especies vamos a tener porque algunas son muy territoriales.

En segundo lugar, debemos pensar en el tamaño de la urna. Para esto los factores más importantes a tener en cuenta son el espacio disponible en casa, dónde queremos ubicarlo, qué especies queremos mantener y el factor económico. Debemos tener en cuenta que suele ser más fácil crear buenas condiciones en un acuario de mayor capacidad. Entre 80 y 120 litros son capacidades muy aconsejables.

Dicho esto ya podemos comenzar a analizar los elementos necesarios para montar un acuario:
Filtro: es una parte muy importante del acuario. Se encarga de controlar los desechos, renovar el oxígeno y crear movimiento en la superficie del agua. No sólo ahorraremos una gran cantidad de trabajo sino que además garantizaremos que la calidad de vida e higiene de nuestros peces sea mucho mayor.
Entre los filtros podemos distinguir dos tipos, los interiores y los exteriores.

• Interiores: se componen de una esponja y están indicados para acuarios de pequeñas dimensiones, pues sólo aportan oxígeno. Los filtros biológicos son otro tipo de filtro interior que se coloca debajo del sustrato y son un complemento de los anteriores, pues se encargan de proporcionar un flujo constante de agua y oxígeno a las bacterias del fondo del acuario, encargadas de descomponer los materiales de desecho. (Jbl CristalProfi filtros interiores)
• Exteriores: indicados para el mantenimiento de urnas de mayor capacidad. Presentan además la ventaja de no alterar la vida interior del acuario durante su manipulación. (Jbl CristalProfi filtros exteriores).

Calentador: imprescindible si se trata de un acuario de agua caliente, para mantener la temperatura del agua entre 23- 26 ºC (Jbl ProTemp S). Un cálculo para conseguir un calentador ideal puede ser de aproximadamente 0,75 W por litro de agua que contenga el acuario. Sin embargo, en caso de que el acuario sea excesivamente grande, podemos repartir esta potencia en dos o más calentadores, de esta forma lograremos una temperatura mucho más uniforme en toda la pecera. Con un termómetro en el interior del acuario podemos controlar que la temperatura se mantenga estable en todo momento.

Grava: la colocaremos en el fondo del acuario a modo de sustrato. Existen muchas variedades y colores (Jbl Sansibar y Jbl ProScape).

Plantas: sirven de refugio a los peces. Pueden ser naturales o plásticas. Tener en cuenta que si son naturales deberemos colocar debajo de la grava una capa de tierra fertilizada especial para acuarios.

Agua: dependiendo de las variedades de peces que pongamos podrá ser agua del grifo con acondicionador o agua de ósmosis para los acuarios de agua salada. El acondicionador (Jbl Biotopol y Jbl Startkit) elimina el cloro, neutraliza el pH y protege la mucosa de los peces.

Decoración: puede ser artificial, colocando distintos elementos ornamentales, o natural con rocas, troncos? (Jbl Mangrove raíces, Cocos Cava).

Una vez dispongas de todos estos elementos necesarios para tu acuario, ya estarás preparado para su montaje. En el próximo post hablaremos de esta parte, ¡mucho más práctica!.